La clasificación implica catalogar e inventariar todos los artículos existentes sin omitir ninguno, describiéndolos detalladamente y estableciendo estándares idénticos de peso, medidas y formatos. También implica normalizar y reducir la diversidad de artículos e indicar cómo debe usarse cada material, lo que permite codificarlos y almacenarlos de manera organizada según sus dimensiones y características usando sistemas de codificación.